La Escuela Técnica N.° 8 D.E. 13 “Paula Albarracín de Sarmiento” de Parque Avellaneda, la escuela primaria “Emilio Von Behring” y el “Instituto San Vicente de Paul”, ambos de Mataderos, festejaron sus 100 años en 2024.
La Escuela Técnica “Paula Albarracín de Sarmiento” está ubicada en Pío Collivadino 436. Ocupa el edificio Villa Ambato, una antigua casona señorial que perteneció a Carlos Olivera quien proyectó y construyó la casa alrededor de 1880 a unos 500 metros del casco de la chacra que perteneciera a su padre Domingo. A principios de siglo XX, la familia Olivera se deshizo de la chacra y, en 1912 donó al estado el lote principal como parque público, que en 1914 fue inaugurado como Parque Olivera, entregó una manzana para el culto a Nuestra Señora De Los Remedios y cedió la Villa Ambato para escuela pública. Así surgió la escuela que celebró su centenario.
Durante la celebración, las docentes jubiladas recibieron a la comunidad educativa. Destacaron que la escuela acompañó, con sus transformaciones y sus distintas modalidades, los cambios sucedidos en el devenir social. En sus inicios como escuela profesional formó mujeres que aspiraban a la independencia económica. Como escuela técnica, se comprometió con la formación de trabajadores calificados y profesionales. Como bachiller orientado en disciplinas sociales, aspira a formar estudiantes que puedan ampliar y profundizar la comprensión del mundo social.
Esta escuela ha recibido reconocimientos por sus proyectos educativos ambientales. En 2022, en ocasión de la 57° edición de la Feria Ambiental, realizada en el marco de la Feria Juvenil de Ciencia, Arte y Tecnología, recibió el primer premio de nivel secundario por su proyecto “Biodiversidad en memoria”. Anteriormente había sido seleccionada como finalista en el premio Mejor Escuela del Mundo, por su proyecto ambiental vinculado al Centro clandestino de detención, tortura y exterminio (CCDTyE) Olimpo. Estos proyectos forman parte de una serie de distintas propuestas relacionados a la biodiversidad que incluyen huerta, hidroponia, acuaponia y senderos de plantas nativas en el Olimpo, dando así lugar a “un espacio de vida donde hubo muerte”.
Los ex alumnos fueron los oradores más importantes del encuentro, portadores de la memoria de la institución. Las exalumnas contaron que la princesa de España María Pía Padilla Borbón había sido su preceptora. “Había salido en la revista Selecciones del ‘52’”, recordaron.
La Escuela N.° 11 D.E. 20 “Emilio Von Behring” está ubicada en Av. Cnel. Cárdenas 2652, en el barrio de Mataderos. Es una escuela pública, de Jornada Simple, extendida en sexto y séptimo grado.
La comunidad educativa de la Escuela festejó su centenario el 3 de octubre. Participaron ex alumnos, ex directivos y ex docentes, que contaron sus anécdotas, demostrando un gran sentido de pertenencia a su escuela y al barrio. “El torito”, la mascota del Club Atlético Nueva Chicago, hizo gala de sus dotes artísticas para el baile, acompañado con música interpretada por la banda de la policía. En la biblioteca se expuso el patrimonio histórico. Un ex alumno hizo notar la firma de los familiares de Von Behring en el libro de oro de la institución.
“Los habitantes de Mataderos la llamaban ‘la escuela del zanjón’, porque en esa época el arroyo Cildañez no estaba entubado. Era peligroso llegar caminando por la orilla porque existía la posibilidad de resbalarse”, dice Alicia Colella, su directora.
Creada el 28 de mayo de 1924, con la denominación de Escuela N.° 18 del Consejo Escolar 20, fue inicialmente una institución educativa para varones y tuvo sus primeras instalaciones en la calle Francisco Bilbao 6587. En enero de 1942 fue trasladada al edificio que actualmente ocupa en la calle Coronel Cárdenas 2652.
Uno de los momentos más destacados en la historia de la escuela – nos cuentan – fue el 25 de octubre de 1968, cuando se llevó a cabo el acto de imposición de su nombre. En este evento se decidió nombrar a la escuela en honor a un distinguido médico y benefactor de la humanidad, Emilio Von Behring, quien descubrió el suero antidiftérico en 1892. Este descubrimiento es invaluable para salvar miles de vidas, especialmente la de los niños y las niñas hasta nuestros días. La imposición del nombre de Emilio Von Behring no solo fue un reconocimiento a su importante contribución a la medicina y la humanidad, sino también un acto simbólico que refleja los valores y la misión educativa de la escuela. Rendir homenaje a quienes luchan desinteresadamente por el bienestar común, resalta el compromiso de la escuela con la cultura, la gratitud y el reconocimiento a quienes contribuyen con el progreso de la humanidad desde la educación.
Sumándose a los reconocimientos, la Legislatura de la Ciudad aprobó una resolución declarando su beneplácito por el 100° aniversario de la Escuela y dispuso la colocación de una placa recordatoria. En sus fundamentos señala: “La escuela Primaria N° 11 DE 20°, “Emilio Von Behring” representa una parte invaluable de la historia educativa de nuestra ciudad. Supo congregar en sus aulas manifestaciones de diversas culturas de las comunidades inmigrantes y de la impronta porteña, recogiendo del barrio sus ritos y costumbres para convertirlas en campos del conocimiento. Las instituciones educativas con una larga historia no solo son testigos del devenir histórico de nuestra sociedad, sino que también son guardianes de tradiciones, valores y conocimientos que enriquecen el patrimonio cultural de nuestra ciudad. Es de vital importancia reconocer y valorar el legado educativo y cultural que estas instituciones representan, así como preservar y promover su memoria para las generaciones futuras”.
También en Mataderos, Manuel Artigas 6142, se encuentra el “Instituto San Vicente de Paul”, una Institución de gestión privada, católica y mixta, inserta en la Pastoral Eclesial y en el Sistema Educativo Nacional. La entidad propietaria es el Arzobispado de la Ciudad de Buenos Aires.
Cuenta con Nivel Inicial y Primario, con dirección independiente en cada uno de ellos, que funcionan en dos turnos de jornada simple, y con un Proyecto opcional para las familias en las que trabajan ambos papás, llamado Programa de Aprendizaje Intensivo en contraturno. En 2020 incorporó en el Nivel Inicial sala de 2 años y doble jornada en sala de 3. Actualmente la escuela atiende a más de quinientos alumnos.
La Iglesia San Vicente de Paul está incluida entre los 73 inmuebles incorporados al catálogo definitivo de inmuebles protegidos de la Ciudad, según la Ley inicial aprobada por la Legislatura en su sesión del 17 de octubre. Estar incorporado a ese catálogo implica una protección patrimonial especial debido a sus valores urbanísticos, ambientales, arquitectónicos, históricos, testimoniales o simbólicos.
El historiador barrial Ofelio Vecchio recoge la historia de su creación. En 1913, el padre Luis Naón coloca la piedra fundamental de este templo, en lotes que había recibido de su tío Juan. Dedicada al divino Rostro, fue apadrinada por el Intendente Municipal Joaquín de Anchorena y la señora Mercedes Peyralle de Arana. También a iniciativa del padre Naón, se colocó la piedra basal de la Escuela de Artes y Oficios del Divino Rostro, antecedente del Colegio Parroquial de San Vicente de Paul. En 1920, ya adelantadas parcialmente las obras de la iglesia del Divino Rostro, el Oratorio deja de existir, y la Conferencia vicentina se traslada a Manuel Artigas. El altar se coloca en el corredor del despacho parroquial, ya terminado, y se inicia allí el oratorio Festivo hasta mayo de 1922. El 14 de abril de1922, el padre Luis Naón subió al campanario, a ver si estaba todo en orden para poder inaugurar el 16, sábado de gloria, la Iglesia cuya construcción iniciara en 1913. Enganchó su sotana con la saliente de la escalera de caracol interna, y cayendo desde lo alto, falleció en el acto. La autoridad eclesiástica, en homenaje al padre Luis que pertenecía a la congregación Vicentina, decidió nominarla y ponerla bajo la advocación de San Vicente de Paul.
La Parroquia se inauguró el 28 de mayo de 1922, a cargo el párroco R.P Miguel Lloveras. A mediados de 1924 comenzó a funcionar el colegio con el Padre Lloveras como Director. Fue la primera escuela privada y parroquial de los alrededores creada con el objetivo de brindar educación a los niños de la zona. En sus comienzos el colegio fue de varones y funcionaba, en algunos casos, como un internado para albergar a niños carenciados del barrio. A través de los años, se fueron realizando diversas modificaciones edilicias y sobre la oferta educativa que brinda la Institución. En el año 1989 se incorporó el ingreso de niñas.
